La noche del 15 de octubre de 1972, en las cercanías de Valera, estado Trujillo, Venezuela (lat. 9°19′0″ N, long. 70°37′42″ W), se registró un fenómeno luminoso acompañado por un estruendo en el cielo.
Al día siguiente, en el "Fundo El Tinajero", el médico Argimiro González y su huésped Juan Dionisio Delgado descubrieron una escena insólita: una vaca muerta con la espalda aplastada, junto a un fragmento de roca que resultó ser un meteorito.